Old Fashioned especiado de Tournant

Historiadores, mixólogos y amantes de la gastronomía coinciden en que el Old Fashioned es uno de los primeros cócteles con nombre, una mezcla clásica de whisky de centeno (el aguardiente original), bitter, azúcar y agua. Con orígenes históricos a principios del siglo XIX, ganó popularidad, pasó de moda y, para la década de 1860, amasó una nueva clientela. Años después, se le denominó oficialmente Old Fashioned. Más de un siglo después, esta bebida emblemática ha cambiado poco en todo este tiempo. Si bien los bármanes han modificado la bebida, actualizado los aromas y modificado las decoraciones para crear bebidas exclusivas, en general, el Old Fashioned sigue siendo popular y sencillamente delicioso. Jaret y Mona, fundadores de Tournant, aportan su enfoque natural, de la granja al fuego, al Old Fashioned con una moderna y fascinante receta, que utiliza jarabe de arce y ralladura de naranja para equilibrar el bourbon y el bitter. Y como los ingredientes y la preparación son tan importantes para el resultado final, recurren a bourbon elaborado en pequeñas cantidades, jarabe de arce real, naranjas frescas de granja y el cuchillo pelador de Benchmade, parte del juego de 3 piezas, para obtener esa rodaja perfecta de cáscara de naranja para decorar su creación personalizada.

INGREDIENTES

4 onzas de bourbon

1 oz. Dram de pimienta de Jamaica

2 cucharaditas de jarabe de arce

6 pizcas de amargo de cardamomo o naranja

2 tiras anchas de ralladura de naranja

2 cerezas Amarena

PREPARACIÓN

Añade hielo a un vaso mezclador, luego añade el bourbon, el trago de pimienta de Jamaica, el jarabe de arce y el bitter. Remueve hasta que esté bien combinado y el exterior del vaso esté frío al tacto.

Cuélelo en dos vasos old fashioned llenos de hielo hasta la mitad. Ensarte dos palillos con una cáscara de naranja y una cereza y equilibre cada vaso.

Diseñado para disfrutarse lentamente, el Old Fashioned es la bebida perfecta para disfrutar en la terraza con amigos en una fresca noche de invierno o en casa junto a la chimenea. Ahora que ya tienes la receta maestra de Old Fashioned, coge un par de vasos y unos cubitos de hielo, consigue los ingredientes locales más frescos, el cuchillo perfecto y sirve un par de los mejores Old Fashioneds que hayas probado. Y, por cierto, no hay nada de malo en disfrutar de esta bebida en solitario. ¡Considéralo una recompensa por haber aguantado todo el año!